Esta frase me ha acompañado por los largos años de mi vida
desde que tengo conciencia, sin exagerar. Y cada vez se vuelve, no molesto,
pero si incómodo.
No hay persona en el mundo que haya conocido y haya dudado
de mi edad completamente, ni siquiera en broma. Incluso los amigos de mi
hermano, lo miran en respuesta a mi edad con la esperanza de que este bromeando
y se topan que no. ¡No importa cuánto me esfuerzo! Siempre aparento menos.
Y lo peor es que no es uno o dos años, son como cuatro a
cinco años que me bajan, ósea ya ridículo. Porque yo tengo actualmente 20 años,
y las personas creen que tengo 16 y hasta peor me han dicho que 15 años. Y cómicamente
esto más me lo han dicho en el trabajo, creyendo que estoy ahí de pasada. Es
incomodo, porque me ven como una “niña” y aunque no he tenido problemas, si me
hace sentir que me tengo que esforzar un poco más para ganarme un lugar por así
decirlo.
Eso que quiere decir, que he tenido que buscar estrategias
para verme o por lo menos aparentar de más edad. Y una de ella que mi mama me repetía
mil veces, era que me arreglara más. Con eso empecé a usar maquille, verme
miles de tutoriales para no dar toda la pena en la calle y no parecer un
payaso, ya que si no te maquillas como se debe pues se nota y se nota feo. Lo sé
porque al principio no fue fácil para mí. Adicionalmente pues empecé poco a
poco, y digo poco por muy poco a poco a dejar las zapatillas. Soy fielmente
amante de las zapatillas por mil años luz antes que los tacos, o mejor dicho
cualquier otro tipo de zapato que no sea zapatillas. Detesto las ballerinas,
las sandalias, alpargatas o cualquier “chingadera” que exista. Entonces empecé
a usar zapatos de vestir con un taco moderado para salir, que bueno al final
nunca quedan mal. Y pues ser menos simple al vestirme, que solo un polo, jean y
zapatillas.
Toda yo ha ido menguando para poder ya estar a la altura de
mi edad, me ha costado lo digo porque, aparte que soy muy rochosa cuando me
visto algo por primera vez, y tampoco no estropearlo con mis tonterías. Pues lo
he logrado ¿Y para qué?
Pues para nada, porque al final con todo eso y más tonterías,
siguen diciéndome lo mismo, siguen diciéndome que parezco Quinceañera y mil
cosas más.
¿Valió mi esfuerzo? Si pero por la puras. Pero bueno que
puedo hacer. Creo que por mi tamaño y mi cara de niña siempre me veré menor. Lo
cual en el futuro, como todo el mundo dice, me ayudara más. Pero que me
importa, el hoy es que sigo viéndome niña. Y hasta mis propios amigos me
molestan en broma, llamándome “niña”, “toma leche para que crezcas”, “ya te
llegara el desarrollo” y tantas cosas más. Que al final, no puedo negar que me
parto de risa con ellos.
Mi conclusión es simple, sino puedes cambiar algo, pues ríete
de ello.😼
¿También te pasa que no aparentas tu edad? ¿O algo parecido
que has tenido que hacer miles de cambios? ¡Déjalo ya en los comentarios!